El ecoturista ejemplar
Ser un ecoturista ejemplar es disfrutar de la naturaleza, conocerla y contemplarla de una manera responsable, sin alterar el medio natural.
Cuando visitamos cualquier entorno natural es esencial que evitemos dejar huellas innecesarias, minimizando así el impacto humano. Cada pequeña acción cuenta, y es responsabilidad de todos actuar de manera sostenible para proteger la naturaleza que nos rodea.
Adopta una mentalidad ecoturista: planifica tu visita e infórmate
Sé consciente de la importancia de tu papel activo como visitante del Parque, puesto que con este enfoque contribuyes a la conservación de las Islas Atlánticas y su biodiversidad.
Para ello antes de realizar tu viaje, planifica la visita e infórmate sobre todos aquellos aspectos que condicionen su estancia en las islas: época, transporte, accesos, servicios, actividades… hay que ser consciente de nuestras acciones y decisiones mientras exploramos destinos turísticos, promoviendo prácticas que minimicen nuestro impacto ambiental y fomentando el cuidado y preservación de los ecosistemas.
Al adoptar una mentalidad de ecoturista, nos convertimos en defensores de la biodiversidad y nos comprometemos a disfrutar de la belleza natural de manera responsable, dejando una huella positiva en cada lugar que visitamos. Es la mejor manera de dejar este legado para las generaciones futuras.
Aprender sobre a biodiversidad y comprender los ecosistemas de las islas es otra manera de ayudar a su preservación. Compartir estos conocimientos con los demás también ayuda fomentar la conciencia y el respeto hacia el entorno natural.
Inspira a los demás
Cómo actuar
Recoge tus residuos
En las islas no hay contenedores de basura, por lo que es esencial que seamos responsables de los residuos que generamos para proteger la belleza natural del Parque y garantizar la seguridad de los animales que viven en él. Además de evitar daños en los diferentes hábitats de las islas, si los animales ingieren alimentos humanos o sustancias dañinas como plásticos, pueden enfermar o incluso volverse agresivos.
Por lo tanto, es fundamental que seamos responsables con nuestros residuos y nos los llevemos de vuelta.
Minimiza el ruido
El ruido puede ser dañino para la vida silvestre, especialmente para las aves que anidan y descansan en las islas. Los ruidos fuertes y repentinos pueden asustar a los animales y afectar su comportamiento, alimentación y reproducción. Además, puede arruinar la experiencia de otros visitantes que buscan disfrutar de la tranquilidad y la belleza natural de las islas.
Protege los ecosistemas marinos
Durante nuestra visita debemos evitar dañar la vida marina. No están permitidas ni la pesca deportiva ni la pesca submarina y actividades como el buceo o el esnórquel deben practicarse de forma responsable. No debemos recolectar conchas, piedras y restos de fauna marina como recuerdo (como mejillones, lapas, bígaros, etc.) ya que también tienen un papel fundamental en mantener el equilibrio de los ecosistemas y su ausencia puede alterar la biodiversidad de las islas.
Cuidado con las cremas de sol y los repelentes de insectos cuando nos bañemos: sus componentes químicos no se degradan fácilmente y pueden permanecer en el agua durante mucho tiempo, dañando el ecosistema acuático y los organismos que lo habitan. Opta siempre por opciones biodegradables y respetuosas con el medio ambiente.
Respeta las zonas protegidas
Para asegurar el futuro de las islas es fundamental que caminemos únicamente por los caminos señalizados y evitar las zonas de reserva y especial protección.
Nuestra seguridad y la conservación dependen de ello.
Respeta la fauna y la flora
Las islas son el lugar de vida de las especies que alberga y, como tal, debemos respetarlas y cuidarlas.
La fauna que habita en las Islas Atlánticas representa un patrimonio natural irremplazable. Es importante mantener una distancia segura, ya que los animales salvajes pueden ser impredecibles si se sienten amenazados. Tampoco debemos tocarlos, alimentarlos ni capturarlos, ya que alteramos el equilibrio natural de los ecosistemas.
Las flores y los frutos son necesarios para el desarrollo de plantas y para la alimentación de muchos animales, por lo que debemos cuidarlos. Para mantener su diversidad, es fundamental que evitemos arrancar, cortar o pisar las plantas y flores.
Cumple la normativa del parque
Antes de realizar la visita es importante consultar la normativa del parque.